Igualarte x Exyo
20 de junio de 2025
🎥 Igualarte: el arte de ser uno mismo
Todo empezó con un correo que llegó una mañana cualquiera, pero que traía consigo algo diferente. La Fundación Igualarte de Vigo quería un vídeo y no uno cualquiera. Querían algo que mostrara quiénes son, cómo viven el arte cada día y todo lo que hacen por la inclusión real. Y confiaron en nosotros para contar esa historia.
Nos emocionó desde el primer minuto. IgualArte no es una fundación más; es un espacio donde las personas con diversidad funcional no solo encuentran un lugar para expresarse, sino donde son protagonistas. Donde se canta, se baila, se actúa, se crea. Sin filtros. Sin barreras. Sin etiquetas.
🎬 El rodaje: entre focos y risas
La grabación fue una experiencia que difícilmente olvidaremos. Durante varias horas convivimos con artistas, educadores, familias y voluntarios. Nos abrieron las puertas de sus aulas, de sus ensayos, y lo más importante: de su confianza.

Todo lo que grabamos fue real. No hubo poses ni escenas preparadas: solo personas en su día a día, con ganas y con corazón. Estuvimos en una actuación de teatro llena de energía, donde no todo salía perfecto, pero sí auténtico. Charlas espontáneas, gestos naturales, abrazos de verdad.

Al final, cada plano terminó contando algo más grande: cómo un grupo de personas crea, aprende y comparte siendo exactamente como son.
🎞 El montaje: contar sin explicar demasiado
El reto era claro: no sobreproducir, no edulcorar. Mostrar lo esencial. Así que optamos por una narrativa sencilla, directa, que dejara hablar a las imágenes. Pusimos la voz en quienes normalmente no la tienen.

El resultado final fue un vídeo que no solo emocionó al equipo de Igualarte, sino que también nos tocó a nosotros. Porque a veces un encargo se convierte en algo más. Se convierte en aprendizaje. En perspectiva. Es un recordatorio de por qué elegimos contar historias con una cámara.
💜 Lo que queda
Ese vídeo hoy forma parte del alma digital de Igualarte. Lo usan en sus redes, como carta de presentación y como testimonio. Pero más allá de eso, quedó un vínculo. Un equipo técnico que salió diferente de como entró. Y una certeza: cuando el arte es inclusivo, se vuelve más arte todavía.

Gracias a todas las personas de Igualarte por abrirnos las puertas con tanta cercanía, por dejarnos entrar en vuestro día a día sin filtros, y por hacernos sentir parte del proyecto desde el primer momento. Nos llevamos algo que no se graba con la cámara: la sensación de haber vivido algo real y valioso.
El equipo de exyo